Cambiar el nombre del Programa de Consolidación Familiar a partir de la fecha, el cual pasará a llamarse “ADOPCIONES”, conservando sus mismas funciones y competencias conforme a lo establecido en la Ley Especial de Adopciones y el Reglamento de la misma Ley, debiendo garantizar en todo momento EL INTERÉS SUPERIOR DEL NIÑO, y en aplicación a lo establecido en la Constitución de la República, las Convenciones Internacionales de Protección de la Niñez, el Código de la Niñez y la Adolescencia y demás legislaciones aplicables.