Este informe de McKinsey (junio 2025) analiza el impacto transformador de la inteligencia artificial generativa y la automatización en los sectores de bienes de consumo (CPG) y comercio minorista. El estudio proyecta que, para 2035, la tecnología podría afectar hasta el 55% de las actividades laborales actuales, siendo la cadena de suministro y las funciones corporativas las áreas con mayor potencial de automatización (alrededor del 40% y 35% respectivamente), frente a un impacto menor en ventas.

El documento enfatiza que el éxito no radica simplemente en adoptar nuevas herramientas, sino en rediseñar fundamentalmente los roles y flujos de trabajo. Propone que las empresas deben moverse hacia modelos donde el tiempo ahorrado en tareas repetitivas se reasigne a actividades estratégicas de mayor valor. Para lograr esta transformación, se recomiendan cinco acciones clave: construir una base de datos objetiva sobre la fuerza laboral, invertir en infraestructura tecnológica, redefinir la estructura organizacional, crear equipos de liderazgo multifuncionales y realizar una inversión masiva en la gestión del cambio y la recapacitación (upskilling) del talento humano.